Mujeres haciendo historia: Betty Cisneros

Betty Cisneros

Sin duda alguna, Beatriz Cisneros es una de las maquillistas más reconocidas de nuestro país. Ella marcó un antes y un después en esta industria que en algún momento estuvo, en su mayoría, conformada por maquillistas hombres.

La creatividad está en la sangre de Betty, desde muy pequeña, los colores y las manualidades llamaron su atención. Sin embargo, su primer acercamiento real con el maquillaje fue durante la época en la que ella realizaba nado sincronizado.

“Mi mamá siempre vio el gusto que tenía por las manualidades y lo fomentó en mí inscribiéndome en infinidad de cursos y talleres hasta que finalmente me di cuenta que lo que más me gustaba era maquillar. En este entonces, la situación en México no era como lo es ahora. No había nada de información, no había ni una sola escuela de maquillaje. Lo más cercano era la cultora de belleza… entonces, para mí fue muy frustrante porque no encontré el lugar idóneo para desarrollarme”, platica.

Al no contar con un espacio de formación profesional, Betty comenzó a estudiar y maquillar de forma autodidacta. Conforme fue creciendo, se animó a abrir un estudio en el que realizaba todo tipo de maquillaje.

“Siempre me preguntaban en dónde estudié y era algo que me ponía nerviosa y presionada. No quería decir que había aprendido sola. Ahora me arrepiento porque era algo de lo que debí haber estado orgullosa”, comenta.

La oportunidad de Cisneros de una formación profesional, llegó cuando tomó la decisión de irse a estudiar a Canadá, experiencia que le ayudó a cimentar su talento. “Mi panorama y visión del maquillaje cambió totalmente con esta experiencia. Cuando estuve allá tuve la oportunidad de concursar en un evento muy importante y eso me hizo darme cuenta de mi potencial”.

A su regreso a México, se dio cuenta que todos los maquillistas famosos eran hombres. No había ni una sola mujer; y también existía la idea de que solo un hombre te podía decir cómo te veías bien, por lo que se dedicó a romper dicho estigma hasta lograrse posicionar como lo que es hoy en día.



¿Cómo crees qué han cambiado los tiempos?

Ha cambiado abismalmente. Hoy en México hay muchas escuelas que son solo de maquillaje. También entras a una red social y puedes ver artistas de todas partes del mundo e inspirarte.

Las nuevas generaciones ayudan a que los más experimentados no nos quitemos esta chispa de aprender. Y como persona experimentada, el poder compartir mi experiencia me llena de orgullo. Que otras personas crezcan gracias a ti, te hace crecer más.

¿Cómo te cambió como profesional tu paso por MAC?

Es una marca que abrió brecha para otras. Era la más importante y yo dije “quiero estar ahí” es el Disneyland del maquillaje.

Sin duda fue un lugar donde me pude desarrollar. Me siento muy agradecida y también tengo que decir que aproveché la oportunidad que se me dio. Puedes estar en un lugar que te da mucho, pero si tú no estás a la altura y no aprovechas cada segundo ni te fijas en lo que importa, lo puedes tener todo y perderlo todo.

Entonces, gracias a MAC me pude dar a conocer de manera internacional. También traer las tendencias a México. Creo que esto es algo que agradezco mucho de la marca, ya que me hizo tener una visión muy distinta. No es lo mismo quedarte todo el tiempo en tu país, que salir y conocer los distintos mercados, y la importancia que tiene el maquillaje para cada mujer a nivel cultural y socioeconómico.

En esta nueva etapa y con toda tu experiencia, ¿cómo te definirías?

La madurez dentro de una carrera siempre llega. Conforme fui avanzando te das cuenta que las prioridades cambian. Siempre pensamos en el futuro y está bien pero cuando llegas a ese momento no lo disfrutas, no te acuerdas que ese era tu sueño.

Hubo un momento en el que me di cuenta de esto y pensé: “yo voy a comenzar a disfrutar mi vida cada día, no solo en cuestión personal, sino en lo laboral”. Eso me hizo crecer muchísimo. Uno de los ideales de todos es trabajar menos y ganar más y disfrutar todos los días. Yo como mujer, el poder lograr eso se me hace lo mejor.

Actualmente, estoy en los proyectos que deseo. Antes quería estar en todo pero he conseguido un equilibrio muy padre en el que no tengo nada que demostrar, al contrario, lo tengo que hacer conmigo misma y demostrar que de algo tiene que valer todo el esfuerzo que hice atrás.

Me siento orgullosa de abrir brecha para las mujeres. Marcar esa línea en México de la figura de la mujer como maquillista, como mamá, como mujer latina. Que no importe absolutamente nada y que solo vean en ti esa creatividad y ganas de y pasión por hacer las cosas.

¿Qué significa para ti el maquillaje?

El maquillaje es un estado de ánimo. Quizás comenzó siendo algo de vanidad, pero, si lo analizas bien, es algo que te pone de buenas.

En México estamos muy acostumbradas a arreglarnos para ocasiones especiales, cuando en realidad el maquillaje debería ser algo que sea para ti. Algo personal. No te arregles para los demás, arréglate para ti. En la pandemia estuve haciendo lives y siempre les decía: “cuando tú te arreglas y maquillas te dan ganas de hacer cosas. Entonces, cuando estás con esa parte positiva de ti, te da muchas cosas: seguridad, creatividad, crecimiento.

El maquillaje te hace tener un momento muy íntimo contigo. Es un ritual de ponerse frente al espejo y estar contigo misma. Dedicarte ese tiempo es tan positivo. Es como una meditación. Cuidar tu templo a un nivel espiritual y emocional. Es tu tarjeta de presentación.